¡Al fin hemos comprado nuestra vivienda! ¿Cuál es el siguiente paso? Preparar la mudanza… Aunque un cambio de vivienda nos emocione también puede estresarnos, por tener que hacer el traslado, a veces con poco tiempo. Y si encima de todo, es una mudanza con niños…

En ocasiones no incluimos a nuestros hijos en este proceso desde el inicio, lo digo por experiencia. Sin duda, lo peor para ellos es no saber, hasta el último momento, que nos cambiaremos de vivienda.

Lo primero, es que les permita participar en la mudanza. Siempre dentro de lo que sean capaces de entender, según la edad. Usted decide desde qué punto, si al inicio de la búsqueda o cuando ya han adquirido el inmueble. De esta forma, hará que el proceso sea más llevadero para todos. Transformando una labor ardua en una experiencia familiar, muchas veces inolvidable.

Aquí le resumimos algunas sugerencias que pueden tomarse en cuenta, al hacer una mudanza con niños:

1. Prepárelos

Antes de prepararse para la reubicación, hable con sus hijos sobre cómo será la mudanza. Y los desafíos que puedan surgir. Mejor si es al inicio del proceso.

Así van aceptando la idea de tener un nuevo espacio. Además, se evitan los cambios de humor, el miedo o la resistencia a la misma. Si el niño se siente parte de la decisión de mudarse, no lo tomará como algo impuesto.

¿Qué impulsará las ganas de mudarse?

Hágales saber que pueden hablar con usted en cualquier momento y trate de hacer lo siguiente:

• Dígales lo que va a pasar en los próximos días.
• Conteste todas sus preguntas o dudas.
• Muéstreles el lado positivo del nuevo hogar.
• Permítales participar.
• Créeles una ilusión.

2. Visiten el sector donde vivirán

Es importante ver en familia los alrededores de su nuevo domicilio. Ubiquen lugares como parques, plazas, áreas verdes, escuelas, supermercados, etc. Saber lo que está cerca, puede ser un oasis cuando el momento lo amerite.

Mantenga las rutinas

Trate de no desviar los horarios de sueño o comidas de la familia, por el trabajo que acumula una mudanza. Seguir con ellos no solo beneficia a los niños, también a los adultos. Además, nos proveen los momentos de descanso necesarios para poder recuperar fuerzas y continuar.

Es bueno mencionar que, si desea crear una rutina nueva en la familia, el mejor momento de hacerlo es un mes antes de la mudanza. Del mismo modo, agregue las novedades de a poco, así el choque no será muy intenso para los pequeños.

Por último, pero no menos importante…

3. Organice primero la habitación de los niños

Esto le asegurará el éxito a la hora de descansar y entretenerlos. Inclúyalos en este proceso. Acomode los muebles más grandes primero. Luego, deje que los niños, dependiendo de la edad, vayan poniendo las cosas en su lugar. El hecho de unirlos al proceso les dará una sensación de pertenencia.

Al finalizar, felicítelos por el deber cumplido. Una vez el espacio esté listo, les ayudará a continuar con sus rutinas, ya sea de estudios o de sueño. Lo que le asegurará a los más grandes la tranquilidad al final del día o la hora de la siesta.

Por favor, déjenos sus comentarios o dudas y comparta en las redes. Siempre es un placer leerle. Estamos a sus órdenes.

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